Modelo Bequal: Retos de futuro

José Luis Martínez Donoso, vicepresidente ejecutivo de la fundación Bequal, concedió una entrevista a la publicación Cermi.es en la que habló del modelo de certificación de la Fundación Bequal y de los retos a los que se enfrenta actualmente

Desde su inicio, el propósito de la Fundación Bequal ha sido la mejora de la empleabilidad y la inclusión laboral de las personas con discapacidad. Para ello, gestiona un certificado de responsabilidad social, de sostenibilidad, que no solo asegura el cumplimiento normativo en esta materia, sino que reconoce la existencia de políticas inclusivas en materia de discapacidad en las organizaciones.

La aprobación en septiembre de 2015 por la Asamblea General de Naciones Unidas de la Agenda 2030 supuso una gran oportunidad para conseguir este propósito. Dentro de los ODS hay múltiples referencias a las personas con discapacidad y al resto de grupos en riesgo de exclusión, por tanto, la consecución de estos objetivos comportaría mejoras en cuestiones centrales para el colectivo de las personas con discapacidad. Por ese motivo Bequal ha alineado su estrategia con la Agenda 2030, poniendo en valor y distinguiendo la contribución al cumplimiento de los ODS de aquellas organizaciones que adoptan un modelo que demuestra su compromiso con la sostenibilidad.

Además, el sector de la discapacidad, representado por el CERMI, participó en el proceso de redacción de la Agenda Urbana Española, en el Subgrupo de trabajo con el tercer sector, realizando aportaciones y formando parte activa en el proceso de redacción de la Agenda, ya que queremos colaborar tanto con las administraciones públicas como con el sector privado para explicar la importancia de la integración de nuestro modelo y su relevancia para el cumplimiento de los objetivos.

Aunque a lo largo de estos años se han certificado todo tipo de empresas y de distintos tamaños, los tipos de empresas más comprometidos con este sello son aquellas que desean mostrar su compromiso de cara a la contratación pública y las Mutuas colaboradoras de la Seguridad Social.

También las administraciones públicas han mostrado un gran interés en este certificado, pero, sin embargo, la Fundación Bequal todavía sigue insistiendo para obtener un reconocimiento específico u oficial por parte de la Administración pública. Si que es cierto que, a través de los avances legislativos tanto en las leyes específicas sobre discapacidad como en las generales que suponen también avances importantes como la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público o la Ley 11/2018 de Información no Financiera y Diversidad, se incluyen y defienden aspectos que proponen mejoras para este sector.

Actualmente, la Fundación Bequal se encuentra inmersa en un proceso de internacionalización del sello, no solo en Europa. En 2021 se inició un proceso en Uruguay, contando con una empresa de ese país, UMUNTU, y con el apoyo del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de Uruguay, siendo el primer país de América Latina en el que sus empresas y organizaciones podrán obtener la certificación Bequal.

En cada caso se hará necesario la adaptación del modelo a las normativas particulares del país, pero es un proceso que ya conoce la Fundación y que no plantea mayor dificultad.

Se plantean actualmente riesgos de perder los avances logrados en materia de inclusión de las personas con discapacidad debido a la situación geopolítica actual y el enorme impacto que está sufriendo la sociedad. Por eso es más importante que nunca que las empresas, las organizaciones, apuesten por la sostenibilidad, la inclusión y la diversidad real.

Por eso, las líneas de actuación de Bequal irán encaminadas en ese sentido y pueden resumirse en aumentar la difusión y conocimiento del modelo de certificación para ampliar el número de empresas y organizaciones certificadas, el desarrollo de planes de inclusión de la discapacidad en las organizaciones, el desarrollo de programas formativos en conocimiento de la discapacidad y sus necesidades, la realización de proyectos en desarrollo y contribución de la Agenda 2030, sobre todo en el ámbito municipal, la internacionalización del sello y el reconocimiento oficial por parte de la administración pública.